En las culturas de todo el mundo, el postre se considera un acto que normalmente se produce al final de una comida, por lo general dulce. Los primeros para esa época, eran elaborados con panal y miel de abeja, característica esta que los hacia crujientes.
No fue sino hasta la Edad Media, cuando la gente comenzó a disfrutar de los postres más dulces gracias a la fabricación del azúcar; pero aún así, este producto era tan costoso que era ofrecido por los más pudientes en ocasiones especiales.
Los primeros orígenes de los populares postres congelados como el helado, se remontan también a la Edad Media cuando la realeza pediría hielo fresco con sabor a miel o de jarabe de frutas.

El término postre, se utiliza para designar a un tipo de plato que se caracteriza por ser dulce y por servirse por lo general al final de la cena, o como elemento principal en la merienda o desayuno.
Los postres pueden ser básicamente elementos que no requieren mayor elaboración (como las frutas), aunque en la mayoría de los casos se utiliza el nombre “postre” para platos más elaborados como flanes, tortas o masas.
Cada región, país o ciudad; cuenta con sus propias tradiciones en lo que se refiere a la gastronomía dulce, y esto tiene que ver por un lado, con la disponibilidad de productos y materias primas que hay en la zona, pero también con las tradiciones y las costumbres de cada cultura específica. En este sentido, mientras en Europa central los postres suelen ser abundantes, calóricos y más bien pesados por las bajas temperaturas, en Europa mediterránea suelen ser más livianos, al igual que en los países y zonas tropicales.
Tips:
- Al planear una comida, debe tomar en cuenta que el postre es el cierre fundamental. Una mala elección podría arruinar el más lujoso banquete.
- Su perfección va más allá de la preparación: implica terminar en equilibrio y en perfecta combinación con los platos que componen la comida.
Dato interesante:
La palabra postre viene del latín posterum; y este, de post (después). El postre es un dulce o una fruta que se come después (post) de una comida.
Los postres son extremadamente variados en colores, formas, sabores y texturas; pudiéndose encontrar una infinita cantidad de opciones para disfrutar, siendo en muchos casos, el momento más esperado después de la comida y, por sencillo que ésta sea, debe ser perfecto.